martes, 28 de agosto de 2012

LXS ANARQUISTAS SOMOS TODXS Y NO SOMOS NADIE

No somos esxs terroristas "anarco-insurreccionalistas" que os inventáis en vuestros telediarios para hacer que la gente nos tema cuando nos vea atacando y destrozando aquello que nos explota, asfixia y que no nos deja ser libres. No somos "lxs violentxs encapuchadxs de negro" que anoche quemaron un banco. No somos lxs "terribles antisistema sin rostro" que vendéis en vuestros mediocres informativos alarmistas y sin ningún contenido social que no sea el sensacionalismo encaminado a perpetuar el sonambulismo social más absoluto. No somos lxs "radicales okupas yonkis y maleducadxs" que asociáis automáticamente a toda protesta que se os va de las manos, para criminalizarla y ensuciar su imagen de manera sistemática, vaciándola de su contenido real. No somos lxs jóvenes "fracasadxs" y "delincuentes" que intentáis presentar, ni esa imagen distorsionada que os habéis montado de nosotrxs para poner al pueblo en nuestra contra cuando son ellxs, lxs que día a día sometéis, la razón de nuestra guerra.

Somos, en cambio, vuestrxs hijxs, vuestrxs hermanxs, vuestrxs primxs, vuestrxs amigxs, vuestrxs vecinxs. Somos quienes se han hartado de este estilo de vida triste y miserable, de ir de casa al trabajo y del trabajo a casa, parando si eso a tomar una copa o un café de sabor agrio para intentar olvidarnos de esta mierda ahogando las penas en alcohol y cafeína, o quién sabe si para admirar en el escaparate lúgubre de cualquier tienda lujosa todos esos deseos que jamás podremos alcanzar porque han sido diseñados para ser perseguidos, pero no conseguidos. Somos lxs que arrasan con los bancos, sí, pero sólo porque hemos identificado al dinero y a sus actividades financieras como el origen de todas y cada una de nuestras desgracias. Somos quienes prenden fuego a las barricadas, sí, pero es porque sabemos que cortan las calles pero abren los caminos hacia la utopía que cada mañana, nos hace levantarnos de la cama para seguir luchando por un mundo mejor. Somos quienes atacan a la policía, así es, pero es porque sabemos que entre este mundo y el que llevamos en nuestros corazones, ellxs siempre serán un obstáculo, y además, es un acto de justicia social y popular, por todxs lxs compañerxs cuya voz se apagó en sus comisarías o en la brutalidad de un momento de choque en la calle, por todxs lxs caídxs, por todxs lxs que permanecen secuestradxs en vuestras cárceles inhumanas, centros de tortura que deshumanizan y embrutecen para sostener vuestra falsa paz del bienestar, es por ellxs, y por nosotrxs, porque fueron ellxs, pero pudimos ser nosotrxs, es por todxs. Somos quienes nos organizamos para responder a las agresiones del poder sin miedo, porque nada nos da más miedo que preferir algún día un estúpido partido de fútbol antes que luchar por nuestros derechos y por nuestro futuro, por nuestro derecho a sobrevivir en un mundo que nos quiere vivos sólo porque todavía le somos rentables. Somos quienes os escupían en el colegio, quienes pasaban más tiempo en el pasillo que en el aula, quienes se perdían los recreos, quienes no cerraban la boca, quienes se movían demasiado, quienes no sabían cuándo parar de replicar. Somos aquellxs a lxs que vuestras pastillas contra la hiperactividad nunca pudieron domesticar ni anular, porque nuestro amor por la libertad no es un trastorno psiquiátrico, sino un sentimiento demasiado profundo para vuestra mirada predeterminada que jamás podréis comprender, porque carecéis del alma y el corazón necesarios para ello. Psiquiatras, asesinxs con bata, nunca os perdonaremos lo que nos hicisteis, ¡psiquiatrizadxs y orgullosxs! Somos las putas, y sus hijxs. Somos lxs migrantes torturadxs en vuestros CIE, o repatriadxs a sus países donde les espera la muerte o la prisión, sólo por no tener papeles. Somos el germinal de cada semilla de victoria y revolución sembrada por nuestrxs padres, madres, abuelas y abuelos, aquellxs currantes y aquellxs valientes a lxs que nunca pudisteis matar ni silenciar. Somos tus dudas y esa idea de rebelarte circulando de vez en cuando por tu anestesiada conciencia. Somos tu miedo a que todo esto vaya a peor, y tu rabia cuando te bajan el sueldo, te suben el IVA o te obligan a esperar otros cuatro años para jubilarte. Somos la revuelta del deseo contra la mercancía, la sublevación de la pasión contra la barbarie, el grito de la desobediencia contra el totalitarismo mercantil del espectáculo elevado a la superficie. Somos, en esencia, amor y rabia. Somos un puñado de cuerdxs enloquecidxs, embarcadxs en un barco de necixs que zozobra, cuyo hundimiento ya profetizó un genio loco, y aquí seguimos, entre las luces de neón y las sombras del suburbio, conspirando y planeando el ataque al puente de mando para virar el timón hacia la recuperación de nuestras vidas, de nuestra autonomía y de nuestra fuerza, hacia la reapropiación de la potencialidad de asaltar el cielo. Nuestra lucha es una venganza por todos los días que nos vemos obligados y obligadas a despertar en este maldito mundo.

Lxs anarquistas somos todxs y no somos nadie.
Nuestro botín será la eternidad.